lunes, julio 28, 2008

New Slang

Dientes dorados y una maldición para esta ciudad estaban todos en mi boca. Solo, yo no se como consiguieron salir, cariño. Déjame volver a ser el animal que era cuando nos conocimos .Yo era más feliz cuando no funcionaba mi mente. Y si tu me hubieses tomado como a mi me gusta. Como una gaviota toma el viento, bueno yo hubiese saltado desde mi árbol. Y hubiese bailado como la reina de las monstruosidades y el resto de nuestras vidas hubiese ido bien.

Nuevo lenguaje cuando ves las rayas, de suciedad. Espero que este bien cuando mueras, viejo y huesudo. La noche llega como un toro por la corrida. Nunca debería de a ver sido llamada, pero mi cabeza está contra el muro y estoy sola .Y si tu me hubieses tomado como a mi me gusta como una gaviota toma el viento, bueno, yo hubiese saltado desde mi árbol y hubiese bailado como la reina de las monstruosidades. Y el resto de nuestras vidas hubiese ido bien.
La velocidad de dios hacia los panaderos en la noche que se cortan los pulgares y sangran hasta que sus bollos se derriten. Estoy buscando lo bueno de la vida, quizás este destinada a no encontrarlo nunca, sin confianza de un campo llameante. ¿Seré demasiado tonta para refinar?

Y si tu me hubieses tomado como a mi me gusta. Bueno, hubiese bailado como la reina de las monstruosidades. Y el resto de nuestras vidas hubiese ido bien.

miércoles, julio 16, 2008

Round



El insomnio de hoy me obligó a encender el televisor y no fué en vano, me pillé con "Million Dollar Baby", y es inevitable no verla por sexta vez, tampoco es inevitable resumir la sensación final de la pelicula en un "agg...".

Tengo un gusto especial por las peliculas de boxeo (en especial "Rocky"), porque más allá de boxeo es como una filosofía de vida, es como llevar la metáfora a un ring. Así veo la vida, como un round, que se divide en muchos más, algunos los ganamos, otros los perdemos, pero "cualquiera puede perder una pelea".

No hay boxeador sin un entrenador, porque apesar de ser nosotros quienes luchamos, siempre hace falta quien te diga "vamos!" o quien te pase la toalla. Obvio que hay malos entrenadores, y lo único que hacen es hacernos perder batallas y bajar los brazos. Pero están los buenos entrenadores, ya sean personas o las mismas circunstancias, digamos algo asi como el azar, que te enseña, te desafía a seguir el próximo round.

Pero no todo es luchar para vivir, tal asi se representa de manera perfecta en Million dollar baby. Ella lucha por ganar boxeando; en una vida miserable, es como lo único que le queda, tanto que al conseguirlo deja de luchar por ello, y ahora lucha por morir, lo más irónico es que tampoco le resulta fácil. La vida no es fácil, al grado de que también te impide apartarte de ella, es tan complicada que no paro de sorprenderme de ser parte de esta película de bajo presupuesto como suelo llamar a la vida, y es inevitable que no te deje con ese gusto agridulce en la garganta, el cual no tiene motivos, razones, ni fundamento, sólo es! la vida es, asi de taimada y testaruda, como un niño de 3 años que no sabe controlar sus impulsos y cambia de gustos a cada rato.


Y es así que al momento de perder un round, suelo preguntarle a la vida un "¿por qué?" o le exijo una opinión, y no consigo respuestas. Es por eso que he tenido que responderme por mi cuenta, y la mejor respuesta que he encontrado es ésta: la vida viene con un par de guantes incluídos y tu misión es averiguar para que sirven. Ahí está el problema, los guantes vienen sin un manual, lo ideal y más sensato es usarlos para sobrevivir: luchar y seguir, antes de que aparezca el tipo y te coloque la sillita arriba del Ring en un momento inoportuno y te quite la posibilidad de usar los guantes y no te deje más opción que mirar hacia atrás con las manos vacías.

jueves, julio 03, 2008

Tiempos de plasticina

Cuando era muy pequeña, recuerdo ser una niña observadora, igual que ahora, pero sin jumper, sin un moño requete peinado, ni una colación en la mochila. Solía mirar por la ventana, caminaba tocando las sillas, las cortinas, hacia dibujitos con el dedo por la ventana y en el espejo del baño. Las tardes eran tibias y el sol reflejaba sombras alegres con dedos llenos de plasticina.
Cuando era muy pequeña me escondía bajo una mesa azul, con las piernas flectadas (con tal de que la "tía" no me viera), y ahí, derrepente, aparecía el niño de los ojos negros, era el más desordenado del curso, indiferente, el porfiado. No hablabamos mucho, pero entendiamos nuestros "roles": el de él era ser castigado, el retado, el conflictivo de la sala, el poco querido, lo que las reuniones de padres lamentaban. Yo por otro lado era el ejemplo, el orden, la alumna fácil de tratar y poco problemática.
Era la dupla orden-desorden, pero ambos deseabamos cambiar de roles, él deseaba no perder el control y yo deseaba perderlo, nos necesitabamos de alguna u otra forma. Fue así que me fuí conviertiendo en su complice y él en mi héroe, yo protegiendo su odio contra el mundo y el defendiendome del mundo, eramos la perfección pura con un telón imperfecto.

El Futuro

Hoy les hablaré del futuro:

"








..."

miércoles, julio 02, 2008

Cuestionamiento

Mira, yo no entiendo bien...
si esto es un dolor del colón
o mariposas.
No diferencio bien si esto es risa
o es verguenza.
Me confundo entre buscarte
y necesitarte.
Me desespera no saber que decir
y cuando debo callar.
No se si elogiarte es lo mismo
que quererte.
Aveces pienso que eres perfecto
o un invento personal.
No se si coincidimos por el azár
o nos estamos persiguiendo.
No se si mi corazón late más fuerte por verte
o es la hipertensión.
Quizás esto pueda resultar muy obvio
o muy oculto.
Aveces pienso que todo lo sabes
y otras que desconoces todo.

martes, julio 01, 2008

Stolichnaya

Un colchón hacia un rincón de la habitación
una ventana entreabierta
humo, ceniceros, inciensos, un trago
Al frente una televisión y alguna película que sirve de pretexto
un sillón sátiro que nos observa
unas sábanas silenciosas
son el escenario del crimen perfecto
dos cuerpos cómplices
un silencio envuelve las cuatro paredes
un murmullo se cuela entre nuestros oídos
una sonrisa da el inicio
luego una respiración ahogada
un suicidio colectivo
asesinos de cuerpos
llenos de venganza
una competencia a oscuras
llega el fin
de vuelta a la conciencia
volvemos a ser cuerpo y razón,
interrumpimos el silencio,
en la tele están dando las noticias,
ahora somos seres tibios y suaves
leyendo y riéndose de alguna falsedad del horóscopo
y sí, -un café caliente no es malo...
(una sonrisa y 2 de azúcar porfavor).

3:55

Puedo escribir los versos más incomprendidos esta noche, escribir por ejemplo que mis intenciones de escritura las desconozco, más segura estoy de que ahora me domina la inercia motriz de mis manos envueltas en una sensación extraña, que no calza con ninguna categoría de las que aparecen en mi diccionario de bolsillo.
En realidad miento, o mejor dicho, unos segundos antes fui una ignorante al volante (al teclado), ahora aparecen cosas de las cuales puedo escribir, no tienen nombre, no sé de donde vienen, pero se me hacen muy agradables y adorables, es como una invasión bienvenida y a la vez agridulce. Se escucha una voz tranquila y observo la silueta de una sonrisa congelada, que de vez en cuando me regala palabras acarameladas y flores para florecer este desierto.
Pero yo no entiendo nada, soy un montón de cosas abatidas en una caja invisible y frágil, no sé llamarlo por su nombre, quizá sea el miedo, quizás sea mutuo o quizás me estoy equivocando.
Sentirse un "Rayuela" de emociones como diría Julio, no es casualidad, creo que solamente falta el manual de lectura y comprensión, falta el empujón para saltar, falta que alguien escuche que han tocado el timbre, alguien está de pie en la puerta buscando el sentido de todo esto, la dirección.

toc-toc